Entrevista: Lynn Crook, la psicóloga que refutó la Falsa Memoria.
Entrevistamos a la psicóloga Lynn Crook, autora del libro "False Memories, the deception that silenced millions" y del artículo que refutó la existencia del Síndrome de la Falsa Memoria.

Hola a todos, volvemos con una entrada/podcast muy especial en el que entrevisto a la autora estadounidense Lynn Crook, una psicóloga de la que ya me habéis oído hablar. En concreto en la entrada/podcast sobre la falsa memoria. Lynn es la psicóloga que se atrevió a refutar el artículo pseudo científico llamado "Perdidos en un centro comercial", de Elizabeth loftus.
Lynn lleva 30 años luchando en contra de esta falacia y ofreciendo datos científicos a las personas interesadas en saber la verdad. Ha publicado más de 20 estudios científicos, varios de ellos dedicados a refutar el llamado Síndrome de la falsa memoria.

En 2022 Lynn publicó un libro llamado False Memories, the deception that silenced millions, (Falsas memorias: el engaño que silenció a millones de personas), motivo principal de esta entrevista. En este libro Lynn nos explica toda la historia de las falsas memorias desde el punto de vista de una persona que lo vivió en primera línea. El libro no está traducido al español, pero os animo a que lo compréis y lo leáis igualmente, porque no es nada difícil de entender y puede aclarar muchas dudas a todos aquellos que estéis interesados en saber qué pasó y cómo.
Antes de ser psicóloga Lynn trabajaba como profesora de francés en un instituto en el estado de Washington, el primer estado de Estados Unidos en permitir que las víctimas denunciaran en su edad adulta los abusos sufridos en la niñez. Después estudió psicología y comenzó a trabajar en un centro de acogida a mujeres víctimas de violencia sexual.
Lynn es superviviente de abuso sexual en el hogar a manos de su padre. Ella lo disoció todo, hasta que a los 45 años comenzó a tener ataques de pánico. Un día , estando en su casa con su marido, tuvo un recuerdo del abuso. Comenzó una terapia, pero cuando comprendió de qué se trataba lo dejó todo y decidió que no quería seguir recordando más, pero su memoria ya había despertado y siguió teniendo recuerdos espontáneos de los abusos. Tuvo una conversación con su madre que le reconoció que ella siempre había sabido que estaba pasando algo con su marido, ante lo cual Lynn les solicitó a sus padres que le pagaran la terapia. Al principio su madre dijo que sí, pero luego su padre consultó con un abogado que le explicó que si le pagaban la terapia a Lynn sería como reconocer que los abusos habían ocurrido. Entonces los padres se retractaron. Lynn rompió todo contacto con ellos y decidió denunciarlos basándose en la nueva ley que el Estado de Washington acababa de aprobar. En un juicio civil que tuvo una duración de más de un mes en donde testificaron algunas de sus hermanas, que también habían sido víctimas de abusos, el juez le dio la razón a Lynn y condenó a su padre a indemnizarla.
El padre de Lynn había contratado a la propia Elizabeth Loftus como perito judicial para testificar en su caso, y una vez terminado el juicio, Loftus se atrevió a explicar en una entrevista una historia completamente diferente de lo que había sido el caso del Lynn. Entonces Lynn la denunció ante la APA por falta de ética. Alguien le dijo a Loftus sobre la denuncia, dándole tiempo de renunciar a su puesto, y por lo tanto la denuncia no pudo seguir su curso y nunca se la juzgó.

Más tarde, Lynn leyó la transcripción del juicio en donde Loftus explicaba que la primera vez que hizo el experimento del centro comercial no funcionó y que tuvo que eliminar a los primeros seis sujetos experimentales y conseguir otros seis. Lynn se preguntó por qué había ocurrido esto y empezó a investigar. Descubrió que esos primeros seis sujetos del primer estudio habían elegido todos ellos la historia falsa como falsa, es decir, que nunca creyeron haber sido implantados con falsas memorias. En base a su investigación descubrió también una trama de siete millones de dólares sobre la que se basaba la ya difunta Fundación de la Falsa Memoria.
Lynn ha participado en varios documentales sobre abuso sexual infantil y ha dado conferencias en Estados Unidos, en el Reino Unido y en las Naciones Unidas.

Debemos reconocerle a Lynn el mérito que tiene por haber actuado con tanta valentía en tantas ocasiones, a pesar de haber sufrido unos atroces abusos que la dejaron muy traumatizada. Debemos reconocerle así mismo que continúe la lucha a pesar de su edad (78 años). Por eso os animo a que compréis su libro y a que paséis el mensaje.
Aquí os dejo algunas frases extraídas del libro de Lynn, False Memories, the deception that silenced millions, traducidas al español:
Seguía sin creerme que mi padre me hubiera sometido a cosas tan vergonzosas para mí. Cuando llevaba unos meses de terapia Eric me preguntó: "¿Qué supondría para ti decidir que tus recuerdos son falsos?" Buena pregunta, pensé. Le respondí: "Cuando recuerdo, me siento asqueada por las cosas tan horribles que me hizo. Cuando te explico a ti lo que he recordado, es como vomitarlo, como sacármelo de dentro para siempre". Y añadí: "Tú me has ayudado a ver el impacto que ha tenido en mi vida lo que me ocurrió de niña. Decidir que mis recuerdos son falsos sería como volver a tragarme todas estas cosas. No puedo hacer eso". Pág 13.
Mis padres parecían muy incómodos en el estrado. Yo me sentía avergonzada por ellos. Me alegré de que ninguno de sus amigos hubiera ido al juicio y que no tuvieran que verlos esforzarse para aparentar calma, mientras mi abogado los interrogaba. A mi abogado no lo pudieron amenazar para acallarlo. Al observar su incomodidad y su bochorno, la vergüenza con la que yo había cargado durante tantos años volvió al lugar a donde pertenecía: con mis padres. Pág. 25.
Los productores del programa de televisión Frontline y Montel Williams Show me llamaron para preguntarme si me gustaría ir a contar mi historia. Les dije que sí asumiendo que estaban interesados. Me pidieron el número de teléfono de mis padres y nunca más me volvieron a contactar. La historia de una víctima adulta que hace justicia en el sistema judicial no era el tipo de historia que estos programas querían mostrar. Pág. 28.
El rol de las madres. Permitiendo que el abuso continúe y recibiendo beneficios económicos y/o sociales a cambio, estas madres están, efectivamente, traficando con sus hijos. Pág. 73.
A medida que los investigadores seguían corroborando los recuerdos traumáticos disociados y recuperados, muchos simpatizantes de la falsa memoria acosaban y organizaban piquetes en contra de los que desafiaban sus argumentaciones. Este acoso agotó los recursos de las víctimas a quienes se dirigían, y afectó a sus familias, a sus clientes y a otros. Pág. 137.
Las matemáticas del abuso sexual. 48 millones de adultos sufrieron abusos siendo niños. Se denuncian menos del 20 % de estos casos. Solo el 14 % de los denunciados acaban en prisión. Toleramos estas matemáticas del abuso sexual. ¿Se sentirían los supervivientes menos avergonzados si supieran que existen millones como ellos en la misma situación? ¿Podrían 48 millones de personas convertirse en un bloque de votantes? ¿Qué otra cosa podríamos hacer como bloque? Pag. 175.
Puedes encontrar más información sobre Lynn en su página web, donde podrás comprar su libro. Puedes escuchar el podcast vinculado a esta entrada aquí.
Gracias por vuestro apoyo.